El conductor está feliz como papá primerizo.
Rafael Sarmiento vive una de las mejores etapas de su vida, ya que no sólo está feliz al lado de su esposa (Jimena Pérez La Choco, conductora de Ventaneando, con quien lleva cinco años de matrimonio) y de su hijo Iker, de 7 meses, sino también ahora a nivel profesional, ya que desde el pasado 13 de agosto conduce el programa Los del siete, en Azteca 7. Platicamos con el conductor, y aparte de su trabajo, nos habló sobre su experiencia como papá.-Rafa, ¿cómo te sientes en tu nuevo programa, Los del siete?
“Bien contento, es un concepto nuevo, a lo que nunca le había entrado. Son dos horas en vivo y en Canal 7. Me encanta que se estén atreviendo a hacer cosas diferentes. Cuando me dijeron el formato, dije: ‘no, olvídenlo, yo no soy esa persona; no bailo, no me disfrazo, no actúo ni hago sketches’. Respeto a quien lo hace, pero yo no, aunque el productor habló conmigo, me contó de qué se trataba y me animé”.
-Ser papá también te ayudará en los temas que se toquen en el programa, ¿no crees?
“Así es; he aprendido muchísimo con mi hijo, y puede sonar a cliché, pero sí te cambia la vida. Dejas de preocuparte por bobadas y te ocupas de lo que sí es relevante”.
-¿Cómo te ha ido con tu bebé?
“No porque sea mi hijo, pero ha sido bien fácil ser papá de Iker. Tiene un temperamento espectacular, es súper sociable, muy risueño. Pueden pasar dos o tres días y no llora, lo que nos preocupó, pero el doctor nos dijo: ‘está sano, sólo que no tiene por qué llorar’. Hace unos ruiditos si tiene hambre, y ya sabemos cuando tiene sueño o es el pañal. Duerme toda la noche, no es llorón ni gritón, tampoco berrinchudo. Es a toda ma... ¡es un tipazo!”
-¿Le cambias los pañales?
“Diario; cuando lo hago, ya me los aviento hasta con una mano, y con la otra hablo por celular. Ya soy un experto; además lo duermo, me toca darle una leche al día y yo lo baño en la regadera desde los tres meses, pues me encanta hacerlo”.
-¿Puedes decir que eres otra persona gracias a tu pequeño?
“Por supuesto, son golpes de la vida y vas cambiando conforme te van pasando cosas. Te puedo decir que murió mi papá, y al día siguiente yo era otro, luego me casé, tuve a Iker y al otro día era otra persona. Las circunstancias te van forjando”.
-¿Te gustaría tener otro hijo?
“Dentro de muchos años; ni siquiera está planeado ni comentado. Ahora el rey es el rey y punto; ya veremos después”, concluyó.
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